Olvidarte

Hoy escribiré como si lo hicieran con las manos de una amiga, contando mi visión  de su situación en primera persona. Por que quiero saber que opináis.
Quiero ayudarla, apoyarla y darle el pequeño empujón que necesita pero se me terminan las palabras, los consejos y los ejemplos.  
Así que os pido que me ayudéis hacerlo vosotros.

Si ella escribiera esta entrada podría haber dicho algo parecido a esto: 


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Cuando te conocí mi hiciste sentir la mujer más feliz y querida de este planeta. Nadie me había hecho sentir así. Pensé que era muy afortunada por haberte encontrado, pero no tenía ni idea de lo equivocada que estaba y de lo caros que me iban a salir esos 4 meses y 15 días de intensa felicidad que me hiciste sentir.

Después de estos 4 primeros meses aunque tu cuerpo estaba a mi lado. Tú, la persona de la que me enamoré, desapareciste, te marchaste y  jamás conseguí hacerte volver.
Hice todo lo que estuvo en mi mano... pero no lo conseguí.

No podía ser, tenía que conseguirlo! sabía que no había sido un espejismo. Si me habías querido tanto y me habías hecho tan feliz, era porque dentro de ti había una persona fabulosa que sabia dar amor, cariño, entrega... pero esa nueva persona en la que te habías convertido solo sabia exigir, exprimirme como persona y estar mal, triste, enfadado, infeliz y a demás tenias la capacidad de hacerme sentir que era culpable la mayoría de las veces.
Yo mientras tanto, intentaba justificar que lo que te sucedía era que en el resto de tu vida: trabajo, estudios, economía... no te iban nada bien y pensaba que si conseguía darte todo lo que estuviera en mi mano volverías a ser la persona de la que me enamoré.
Antes de que me diera tiempo a rendirme, decidiste romper nuestra relación, pero no por mi bien, si no por el tuyo propio. No te preocupó que yo estuviera enamorada locamente de ti o como podía afectarme anímicamente esa decisión.
A los 15 días volviste, me dijiste que querías casarte conmigo, no me lo podía creer, ¡Habías vuelto! 

Un día me duro la felicidad, a las 24 horas me dejaste de nuevo.

6 meses estuvimos separados, aunque siempre en contacto, porque cada vez que creía que comenzaba a olvidarte volvías aparecer.

Decidí marcharme de mi ciudad, huir en busca de una nueva vida, sola sin familia, sin amigos pero con un trabajo prometedor.
Fue enterarte de esto y milagrosamente volviste a ser él de los primeros 4 meses. Y yo? yo volví a caer en tu trampa.

Vivimos 15 días felices en esa nueva vida y volviste a ser ese ser envidioso, rabioso, aburrido, desagradable, egoísta y cruel que me hace tanto daño.
En esta ocasión fui yo la que te dejé, en un momento de lucidez vi que jamas sería feliz a tu lado, que debía madurar y quererme más a mi misma, para conseguir tener alguien a mi lado que me quisiera como me merezco.
Te saque de mi vida, entre comillas, porque tu no te vas de ella ni pidiéndotelo por favor.

Comencé un proceso de reconstrucción: psicóloga, terapias alternativas y forzarme por salir de casa y disfrutar la vida hasta cuando no me apetece.  
Y aunque me siento muy orgullosa de los pasos que he dado sin ti, de lo que he descubierto de mi misma y de haberlo hecho yo sola. No consigo ser feliz, me siento sola y no te equivoques no quiero una pareja, no tengo prisa, ni casi ganas. Sólo quiero personas con gustos y personalidad similares a los míos, con las que compartir el tiempo libre porque de momento no soy tan fuerte como para hacer ciertas cosas sola.
Pero ¿Dónde lo consigo? ¿Dónde les encuentro?

También soy infeliz porque no puedo apartarte de mi mente, no consigo que dejemos de tener contacto, este contacto tan dañino. 
Si no eres tú el que se pone en contacto cuando yo estoy bien, para decirme lo arrepentido que estas de como te has comportado y lo mucho que te arrepientes. Soy yo la que en los momentos de tristeza y soledad, te pido ayuda y apoyo.  En parte porque tu eres el culpable de que este así y quiero que lo pagues tú y en parte porque nadie me ha querido y hecho sentir comprendida como tu.
Pero cada vez que lo hago descubro que no me quieres, no me comprendes ni me apoyas me desprecias y que nunca volverás a dar ni siquiera el cariño que se le da un amigo.

Me enfado tanto conmigo misma cuando actuó así... si que es doble dolor, porque no me quieres y porque no me quiero.

No se porque te quise ¿Cómo conseguiste atarme a ti de ese modo? ¿Cómo cuatro meses y medio pueden conseguir tanta atracción dañina?

Cuando me haces daño de nuevo, creo que jamas voy a volver a caer ante ti, pero esto me lo he dicho tantas veces, que ni yo misma me lo creo.

Necesito no volver a saber de ti, olvidarte para siempre.  Para que cuando me sienta sola, incomprendida, sin querer molestar a los que me quieren con las mismas quejas de siempre,  ni se me pase por la cabeza que tú eres el salvavidas al que puedo agarrarme.

Porque lo único que haces es hundirme. Y yo sólo quiero olvidarte.

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Los que hayáis vivido relaciones toxicas como la de mi amiga, decirle como salisteis de ellas.
Los que os hayáis viajado y vivido fuera sin casi familia ni amigos cerca, decirle como se puede hacer nuevas amistades, como comenzar en una nueva ciudad. 

Los queráis darle ánimos y cariño para que tenga fe de que de todo se sale, por favor no dudéis en comentar.