Disfruta!

Comunicarme es algo que me encanta, desde pequeña he sido muy extrovertida, y habladora. 

Me encanta conocer gente nueva constantemente.

Hay personas con las que puedes mantener una conversación correcta sin más. Pero hay otra con las que realmente conectas. Y cuando este me sucede, no puedo dejarlo pasar, necesito explotarlo y disfrutarlo al máximo. 

Se que una gran parte de las personas no lo comprende  y el otro tanto, lo mal interpretan.

En este blog ya hablé de si debía dejar de ser como soy por esas malinterpretaciones, y decidí que no, que no iba a dejar de ser como soy  y que al que le guste fantástico y al que no también.

El viernes sin ir mas lejos, me entro una llamada en el trabajo, de una persona que se equivocaba de número.  Tenia que llamar a tres teléfonos distintos, iba conduciendo y llamo al primero de los tres sin saber donde llamaba, pensando que no le contestarían. Al escuchar mi voz se quedo desconcertado. Pero en lugar de colgar, fue sincero, me dijo lo que había hecho y que realmente no tenia ni idea donde llamaba.

 Lo hizo con tanta simpatía y franqueza que me hizo muchísima gracia y comencé a reír a carcajadas, el también comenzó a reírse y así estuvimos un minuto solo riéndonos de la situación. Hasta que le dije yo a él donde llamaba. Le gusto mi manera graciosa de contárselo  y me lo agradeció diciendo lo maja que le parecía e intentando hablarme un poquito en catalán.

Se que para muchos esta anécdota no tendrá nada de especial, pero a mi me alegro gran parte de la mañana, me encanta que la gente sea igual de amable y simpática con un desconocido que con alguien de confianza y creo que si las personas fueran así mas a menudo, el mundo sería un lugar mucho mas agradable en el que vivir. 

Y esto viene a mi cabeza porque ayer lo volví a confirmar con un amigo al explicarme los grandes momentos que ha vivido y la cantidad de gente fantástica que ha conocido, gracias a su carácter aventurero y extrovertido. Como por ejemplo el amigo que lo acompañaba esa noche, que había cogido esa mañana un avión desde Bruselas para venir animarlo un poco y pasar una noche de fiesta con él. Sin pensar en nada mas que en disfrutar con su amigo. Porque esa es otra, entiendo que muchas veces en este mundo el dinero nos impide hacer muchas cosas, pero otras nos las impedimos nosotros mismos. Por qué no coger un avión/tren/coche para ir a ver a un amigo? Si lo echamos de menos, nos necesita o porque nos morimos de ganas de verle. Porque es sábado y ya solo queda el domingo? porque hubiera sido mejor planificarlo? 

Hacia mucho tiempo que no me reía tanto y me lo pasaba tan bien una noche y eso fue gracias a la energía que desprendía mi amigo por la visita de su amigo Belga. Eso bien vale el dinero el viaje y todo.

Disfrutar la vida, que nunca sabemos cuanto tiempo nos queda aquí!